En principio la ruta consistía en subir desde el refuguio de pineta al collado del Añisclo y desde allí subir a la punta de las olas, hacer el primer vivac cerca del lago helado, al dia siguiente continuar subiendo al Cilindro, Marboré, los 3 picos de la cascada,espalda del Marborè,Torre del malboré y el Casco,hacer el segundo vivac cerca del refugio de Sarradets y al día siguiente descender por las escaleras asta Gavarnie, ascender hasta el refugio de Espuguettes y subir hasta la brecha de tucarroya y descender por el balcón de Pineta hasta el coche.
El día 27 de agosto después de mirar el parte meteorológico, repartirnos el material y descartar el que considerabamos prescindible, partimos del refuguio de Pineta a eso de las 9:30 dirección al collado del Añisclo con nuestras ``mochilitas´´.
Hacia bastante calor y la subida fue de las duras 1200m de desnivel, después de unas dos horas nos encontrábamos en el famoso collado del Añisclo con una buena sudada encima.
Allí coincidimos con un chico que estaba recorriendo parte del GR11, después de comer algo continuemos por la faja de las olas hasta llegar a un cable, allí desechemos lo que nos indicaba el gps y fuimos atajando por una especie de faja o pequeña cornisa (para los que no sepan lo que es) hasta encontrarnos bajo de la punta de las olas (pico de 3022m)
Fuimos trepando sin dificultad a la punta de las olas (3022m) primer 3000 del día.
Continuemos un poco mas hasta que encontremos un buen lugar para comer y allí detrás de una gran roca preparemos un sobre de cus-cus. Después de comer y consultando el gps y el mapa, pensemos que era una lastima pasar por al lado del Soum de Ramond o pico Añisclo y no hacer cumbre, así que cambiemos de planes y nos dirigimos a escalarlo. La verdad es que el itinerario de ascensión no estaba nada claro pero al final siguiendo unos hitos que encontremos decidimos (después de dudarlo mucho) entrarle por una canal que nos pareció viable,pero que había una buena trepada hasta su cumbre.
Fuimos ascendiendo en algunos tramos con pasos de III y tras ascender mas de 300 m lleguemos a la cima del Soum de Ramond cuya cima es una cresta muy aérea y espectacular.
Cima del Soum de Ramond 3259m . A la izquierda la mole de Monte-Perdido
Cresta del Soum de Ramond
Tras crestear unos metros nos dimos cuenta que no podemos continuar, así que descendemos por donde mejor vemos, encontrándonos con varios des trepes complicados pero como no nos queda otra los afrontamos salvándolos como mejor podemos.
Una vez abajo, crucemos un nevero de hielo con cuidado porque resbalaba mucho y ascendimos hasta un collado que nos dejaba a unos metros de la cima del Monte Perdido, decidimos subir a la cima y pasar la noche en un gran vivac que hay en la cima.
La verdad es que estábamos contentos de como había transcurrido el día, puesto que nos encontrábamos bien de fuerzas después de todo el día escalando montaña arriba.
Después de tomar unas fotos y admirar las grandiosas vistas que nos ofrecía los numerables valles que se quedaban a nuestros pies, nos dispusimos a preparar una escueta cena a base de cus-cus.
Monte Perdido 3348m
Preparamos nuestra mullida cama y nos dispusimos a lo que creíamos iba a ser una agradable noche bajo las estrellas en un lugar único.
Pues no, la noche no fue para nada como habíamos previsto.
A eso de las 3 de la madrugada me desperté un poco desconcertado por lo que veían mis ojos, la noche estaba totalmente encapotada y se apreciaban relámpagos que cada pocos segundos iluminaban el manto de nubes que teníamos encima.
Desperté alarmado a Jose Daniel puesto que según tenia entendido la cumbre de una montaña era uno de los peores lugares para pasar una tormenta (como asi me comfirmo mi compañero) así que tras pensar unos segundos que hacer, decidimos recoger y largarnos echando leches hacia abajo hasta encontrar algún sitio donde ponernos a cubierto. Mientras preparábamos las mochilas me dio un calambrazo en un pie al pisar el aislante, y a Jose Daniel le brillaban los dedos de la mano. Nos estábamos cargando de electricidad y nos apresuremos a terminar de recoger lo que nos quedaba y salimos disparados para abajo.
La cosa empeoraba por segundos, conforme nos pusimos la mochila a la espalda empezó a caer granizo del tamaño de garbanzos y a llover. Os podéis imaginar la situación cayendo rayos sin parar, lluvia,granizo y viento que apenas se veía por donde pisábamos. Intentábamos guiarnos con el gps y orientarnos como mejor pudimos pues no veíamos a mas de 2 metros delante nuestro.
Fueron momentos de inquietud pero no podíamos hacer otra cosa. Lo que normalente es la subida normal a Monte Perdido desde el refugio de Goriz se había comvertido en un torrente de agua que bajaba en algunos tramos muy rapido. En el tramo de cadenas que hay para ayudar a pasar por un sitio algo delicado, resbale con los dos pies y si no llega a ser porque estaba fuertemente cogido a las cadenas,me hubiera despeñado 10 metros abajo.
Después de un par de horas descendiendo encontremos un hueco `habitable´ que había quedado debajo de una gran piedra y hay nos pusimos a descansar un poco y secarnos después de unas horas agobiantes bajo el agua,totalmente empapados y con la moral por los suelos.
A la mañana siguiente nos dispusimos a continuar con nuestra aventura y coincidimos en subir hasta el lago helado y allí desayunar algo y ``hacer la colada´´ con toda la ropa que teníamos empapada.
Los montañeros que pasaban por allí nos miraban y alucinaban con el tenderete que montemos encima de una piedra.
Acordemos ascender al Cilindro mientras se secaba la ropa.
La subida al Cilindro hay que hacerla por una trepada de 3 grado y es algo delicada puesto que no llevábamos cuerdas.
Bonita ascensión esta también, una buena vista del glaciar del perdido y detrás nuestro el glaciar del Vignemale.
Cima del Cilindro 3325m
Volvimos a descender a recoger la colada que ya estaba seca y continuemos con nuestra ruta.Próximo objetivo el Marborè.
Rodeemos todo el Cilindro hasta su espalda y después de llanear una hora o así comenzamos la dura ascensión.
Atravesando unos pedregales lleguemos hasta el comienzo de la subida por un sendero algo roto con fuerte inclinación.
Aquí el esfuerzo realizado hasta entonces empezaba a pasar factura y la subida se hizo agotadora.
Al terminar la subida nos encontrábamos en la ancha loma del Marborè y frontera natural entre España y Francia.
La loma del Marborè es un pedregal de la leche,la verdad que te quedas asombrado de tanta piedra.
Fuimos ascendiendo por una suave pendiente hasta encontrarnos con la cima .
Cima del Marborè 3252m
Hacia un viento del carajo, asi que nos pusimos a resguardo en un vivac a comer unos frutos secos y continuar porque se estaba empezando a cubrir de nubes y después de la experiencia de la pasada noche no nos hacia ninguna gracia volver a mojarnos.
Ahora le tocaba el turno a los picos de la gran cascada.
Primero al de la cascada Oriental 3161m
A continuación el Central 3108m
Para terminar el Occidental 3098m
Todas estas ascensiones son cortas, se va por una amplia cresta y se va haciendo cortas subidas de no mas de 30 min, mas o menos están todas relativa mente cerca unas de otras.
El estomago ya hacia tiempo que protestaba, así que quedemos en comer después de subir a La Espalda del Marborè, esta ascensión fue mas larga y agotadoras que las otras.
Espalda del Marborè 3075
Comencemos la bajada y de nuevo tuvimos que hacer otro destrepe algo delicado, teniendo que extremar la precaución. Teníamos el cielo bastante encapotado, hacia el horizonte se podía distinguir cortinas de agua así que nos dimos prisa para intentar que no nos cogiese de nuevo la lluvia, la comida podía esperar.
Nuestro plan inicial era subir a la Torre del Marborè y a el Casco que son los dos 3000 que quedan en la cresta que hace de frontera entre España y Francia hasta la brecha de Rolando, pero después de casi dos dias pateando nos encontrábamos físicamente cansados, así que decidimos dejarlo para otra ocasión y llegar a la cueva que hay justo al lado de la Brecha y poder pasar la noche bajo techo, por si las moscas.
Nos dirigimos directamente hacia el paso de los sarrios, un paso de roca estrecho que para ayudar a salvarlo hay puestas unas cadenas para mayor seguridad.
Pues bien, al rato se pone a chispear débilmente y ale a ponerse el chubasquero.
Al cuarto de hora oímos amortiguado el estruendo de un rayo, comienza a llover y automaticamente apretamos el paso.
Felizmente y por casualidad vemos un techo de roca a unos 20 metros de nosotros y nos metimos allí como pudimos.
Al momento comenzo a caer granizo como si se fuera a caer el cielo sobre nosotros y relampagueando.
Os estaréis preguntando...
Pero estos chalaos no vieron el tiempo antes de salir???
Pues si, en el parte daban bueno hasta el siguiente día por la tarde, pero los Pirineos son así, por la mañana igual hace un sol de escandalo que por la tarde te puede caer la del pulpo.
Nos dispusimos a comer un merecido plato de pasta que mejor no nos pudo sentar,que hambre.
Viendo el parte para el día siguiente con el móvil, daban un 90% de posibilidades de tormenta eléctrica.
Teniendo en cuenta que aun teníamos que llegar a la brecha, y al día siguiente pegarnos otras 7 o 8 horas hasta llegar al coche, nos dimos cuenta que iba a ser una odisea con el panorama del tiempo.
Decidimos cambiar de planes y pasar la noche allí, para al día siguiente bajar directamente al refugio de Goriz, seguidamente subir al collado superior de Goriz y continuar por el GR 11 hasta el collado del Añisclo
(si ese que nos peguemos una buena pancha subiendo el primer día) y bajar al coche que estaba en el aparcamiento del refuguio de Pineta.
No nos hacia gracia echarnos para atrás pero con el pronostico del dia siguiente era lo aconsejable.
Nos dispusimos a emparejarnos en aquel agujero para pasar la noche y la verdad es que apenas cabíamos los dos tumbados. Pero en cuanto dejo de llover el amigo JDaniel se percato que justo bajo nosotros había otro agujero rodeado de una muralla de piedras. Bajemos y esta ``casa´´ ya nos gusto mucho mas,amplia y lisa, con sitio de sobra para los dos.
Esa noche hizo un frió del copón, pero allí metidos la verdad es que dormimos bastante bien.
A la mañana siguiente el cielo no presentaba el mejor aspecto, pero después de desayunar nos pusimos de nuevo en camino. No podíamos entretenernos mucho pues al medio día daban tormenta.
Fuimos perdiendo altura y des trepando en algunos tramos hasta que de casualidad nos encontremos unos hitos y fuimos siguiéndolos hasta que vimos el refugio de Goriz.
Esta zona resulto ser muy bonita y con terreno escarpado, la verdad es que nos gusto mucho la vuelta hasta Goriz. No vimos un alma hasta que lleguemos al refugio.
En vez de bajar al refugio decidimos ir llaneando para no perder mucha altura, pues las piernas iban pidiendo un largo y merecido descanso.
Una vez en el collado superior de Goriz almorcemos y descansemos un rato.
Para seguir por el GR 11.La vuelta era sin grandes subidas, pero con cada pequeño repecho determinábamos
echos polvo.
Después de unas 3 horas llegábamos a un lugar que nos resultaba familiar
El Puñetero collado del Añisclo. (Puñetero es lo mínimo con lo que se puede calificar,o como lo califico un hombre que nada mas llegar nosotros acababa de subir,una subida indecente)
Pues si se nos hizo larga y pesada la subida, ya os podéis imaginar la bajada después de mas de 2 días danzando por la montaña. Nos esperaba el coche 1200 m mas abajo.
Cuando practicamente estábamos en el coche se puso a tronar pero esta vez fuimos mas afortunados y no nos mojemos.
Lleguemos extenuados y con diferentes rozaduras en los pies habiendo ascendido mas de 4096m de desnivel positivo y otros cuantos de negativo, pero satisfechos porque habíamos vivido 3 días estupendos haciendo una de las cosas que mas nos gusta. Escalar montañas y disfrutar de la naturaleza en estado puro.
